El verano ya llegó así como la aspiración de miles de jóvenes que buscan un espacio dentro de las universidades públicas del país, sin embargo las matriculas de las instituciones no son suficientes para la demanda –al menos es el discurso oficial- por lo que integrantes del Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (Maes) muestra descontento.
“El subsecretario de Educación Superior, Salvador Jara, dice que en la Ciudad de México y su área metropolitana la oferta es más grande que la demanda, pero nos quiere ofrecer a los jóvenes espacios en escuelas patitos y becas para instituciones privadas”, afirmaron los estudiantes la tarde de ayer.
Este grupo estudiantil conformado por el descontento surgido por la misma problemática desde el 2006 marchó por la tarde del Hemiciclo a Juárez a la Secretaría de Educación Pública (SEP) para exigir la instalación de una mesa de diálogo con representantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), con la finalidad de que las autoridades de esas casas de estudios abran lugares para ellos en sus aulas.
Una de las principales quejas de los marchantes es que por ejemplo el año pasado hicieron el examen de ingreso a la UNAM 208 mil aspirantes y sólo 9 por ciento obtuvo un lugar en la institución. En la UAM concursaron 96 mil y fueron aceptados alrededor de 10 mil. El IPN, de los 98 mil aspirantes que hicieron examen, aceptó a dos de cada 10.
“Necesitamos un plan integral para solucionar el problema de ingreso a las universidades”, declararon minutos antes de entregar un documento dirigido a Jara, en el que, entre otros puntos, solicitaron la instalación de la mesa de negociación.
