(13 de enero, 2020. Revolución TRESPUNTOCERO).- Balaceras, golpes, acoso y constantes amenazas han marcado la vida de diversos trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex), quienes han señalado actos de corrupción al interior de la empresa desde que el presidente López Obrador hizo pública su intención de sanear Pemex y rescatar la industria energética de nuestro país.
A más de un año de que los obreros se organizaran para exponer las anomalías que se viven en todas las secciones donde opera la petrolera, éstos no dudan en señalar que detrás de todos los atentados que han sido víctimas están los líderes de las diversas secciones del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
Desde el pasado mes de octubre, Revolución TRESPUNTOCERO ha documentado los diversos actos de corrupción que imperan en Pemex, los cuales no sólo tienen que ver con el robo de combustible, delito que se persigue de forma férrea desde la Federación, también con fraudes a jubilados e incluso con ventas de plazas por 190 mil pesos.
En todos los trabajos periodísticos relacionados con la corrupción expuestos en este portal, se le ha dado voz a quienes buscan rescatar la industria petrolera, mismos que han sido afectados por los líderes sindicales, quienes están dirigiendo las diferentes secciones del STPRM en todo el país al amparo de Carlos Romero Deschamps y de sus cercanos que están en el Comité Ejecutivo Nacional del sindicato.
Es así que obreros como Fred Antonio Navarro López, David Reyes, Fernando Meneces León, entre otros, han sido acosados y amenazados por miembros de las cúpulas sindicales luego de que éstos se han unido a la cruzada del Presidente de la República para sanear Pemex, pero en especial a todo el sindicato petrolero, el cual consolidó su poder al amparo de los gobierno del PRI y del PAN.
Las posturas por cómo se han organizado estos trabajadores ha devenido en que los líderes sindicales hayan actuado en contubernio con personal de Recursos Humanos de Pemex, por ejemplo, para correr de la empresa al jefe de seguridad de la Refinería Miguel Hidalgo, en Tula, Hidalgo, David Reyes, luego de que éste diera a conocer que al interior de la planta existía robo de hidrocarburo.
Fred Antonio Navarro López, trabajador de la Refinería de Tula, a lo largo de un año ha sufrido toda clase de atentados por parte de los miembros de la Sección 35, que encabeza Alfredo Mier y Concha. Navarro López ha sido golpeado por “porros” sindicales al interior de la refinería mientras éste caminaba a su lugar de trabajo cuando cubría el turno de la noche.
Aquella ocasión quienes lo vapulearon se limitaron a decirle “bájale” en alusión a su esfuerzo por señalar los excesos y actos de corrupción que se gestan desde la sección sindical al director de Pemex, Octavio Romero Oropeza. Los señalamientos por diversos actos de corrupción a Navarro López no sólo le han traído como consecuencia golpes, también atentados contra sus familiares y su patrimonio.
Hace unos días su sobrino fue hospitalizado luego de que “aparentemente fue asaltado, no tenían porqué golpearlo hasta mandarlo al hospital, le rompieron dos costillas. Mi sobrino no opuso resistencia y lo dejaron muy mal”, expone en entrevista. con el medio Navarro, quien asevera que por la forma en cómo se dieron los hechos “es prácticamente seguro que fueron personas que mandó el sindicato para hacerlo”.
Aunado a lo ocurrido también le cortaron los frenos de su motocicleta, sin embargo pudo salvarse de un accidente al no ir manejando rápido. Hace unos días destruyeron el parabrisas de su coche a las afueras de su casa, así como también en diversas ocasiones han rayado su automóvil en la refinería mientras está laborando. Pese a las vicisitudes que ha enfrentado no duda en decir que vale la pena luchar contra las cúpulas sindicales.
“Durante un año hemos apoyado a nuestro Presidente en la lucha contra el robo de hidrocarburos, hemos sufrido atentados, amenazas, secuestros, intimidación y represión sindical. Ya nos han balaceado, ya nos han secuestrado, han dañado nuestro medio de transporte como carros, motocicletas, nos han golpeado, a mis compañeros de diferentes secciones también los han secuestrado y golpeado”, narra Fred Navarro.
El trabajador de la Refinería de Tula, Hidalgo, asevera que todo lo ocurrido obedece a la lucha que están realizando varios trabajadores para lograr una democratización real en el sindicato, “pero también recuperar nuestra empresa que es Petróleos Mexicanos, es por eso que hacemos un llamado a nuestras autoridades para que nos apoyen realmente, que volteen a vernos, que no nos dejen solos”.
De acuerdo con el entrevistado, muchos trabajadores de Pemex están comprometidos con la transformación del país al señalar todas las anomalías que existen al interior de la petrolera, así como también al interior del sindicato, “hemos venido descubriendo muchas cosas que se están dando dentro de nuestra empresa y es justo que el Presidente se entere de todo esto”.
Fernando Meneces León trabajador de la Sección 10, perteneciente a Minatitlán, Veracruz, fue balaceado por dos sujetos el 6 de enero, mientras éste conducía su automóvil, jetta color plata, “Una camioneta tipo Ranger se me cerró le pegaron a la salpicadera de mi coche, posteriormente el vehículo se frenó a tres metros de mi unidad, se bajaron de la camioneta dos tipos, uno de ellos me amagó con el arma”.
Meneces asegura que la persona que lo amenazó le exigió que se bajara del auto, pero su reacción fue “echarme en reversa a toda velocidad y de ahí me empezaron a disparar, alrededor de ocho balazos”, al afectado narra que mientras estaba la refriega pasó un taxi el cual fue testigo de lo ocurrido, por lo cual los agresores huyeron, la policía local no se hizo presente.
Fernando Meneces asevera que los agresores iban por su vida. El pasado mes de octubre el trabajador de la Sección 10, comenzó a tener diferencias con el sindicato local, luego de que denunciara que el proceso selectivo que se había realizado fue “una elección amañada y lo llevamos a la junta federal, ésa es la única diferencia que he tenido que es de tipo sindical, estamos en un proceso judicial”.
La Sección 10 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana con cede en Minatitlán, Veracruz, es dirigida por Jorge Wade González, quien lleva en el cargo 20 años en el poder, al igual que Alfredo Mier y Concha de la Sección 35, Wade ha sido señalado en diversas ocasiones como un cacique sindical, además de amedrentar y acosar a trabajadores que buscan la democratización del STPRM.