(24 de mayo, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- El vicecoordinador de los legisladores de Morena en la Cámara de Diputados, Virgilio Caballero Pedraza declaró que la corrupción es el elemento que articula al sistema político mexicano desde hace muchos años –en particular durante las administraciones priistas- y va de la mano con la posibilidad de gobernar.
En entrevista con Revolución TRESPUNTOCERO, el diputado sostuvo que las leyes que integran el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) son limitadas, por lo que, para atacar la corrupción ejercida desde el Ejecutivo federal; es decir, desde la misma presidencia de la República, su grupo parlamentario impulsa la creación de una comisión de la verdad que investigue a Peña Nieto e incluso, a expresidentes.
“De lo que se trata es de llegar a la estructura misma del sistema corrupto que vive nuestro país como gobierno. La estructura proviene de muchos años atrás, es parte de la estabilidad de los gobiernos priistas; tienen a la corrupción como parte de su estructura”, detalló Caballero y afirmó que no se pretende sólo llegar al fondo del posible enriquecimiento ilícito que de manera personal pudieron haber incurrido exfuncionarios; sino como, a través de este tipo de actividades ilegales, mantuvieron la estabilidad política requerida.
Los diputados de Morena y senadores del Partido del Trabajo (PT), proponen que la citada comisión investigue las “áreas de riesgo más preocupantes” en nuestro país, como la privatización de empresas públicas desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari –en beneficio de unas cuantas personas- compras gubernamentales de dependencias como la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) o del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tomando en cuentas que funcionarios de estas instancias ya han sido señalados por estar posiblemente relacionados en actos de corrupción.
También se impulsa una revisión a fondo de la asignación de contratos para desarrollo urbano y proyectos que impliquen afectaciones al medio ambiente y a la salud, del sector financiero y en materia de coacción a la libre expresión, particularmente luego del despido del equipo de reporteros de MVS Noticias –encabezado por Carmen Aristegui- tras la denuncia de un posible conflicto de interés por la adquisición de la llamada Casa Blanca, en la que participó la familia presidencial y la constructora favorita de Peña Nieto, Grupo Higa.
A pesar que los antecedentes recientes en Guerrero y Oaxaca –donde se constituyeron comisiones de la verdad, en la primera entidad, para investigar los hechos de la llamada Guerra Sucia y en la segunda, para indagar sobre la represión a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) en 2006, mientras Ulises Ruiz era gobernador de la entidad- apuntan a que las comisiones de la verdad pueden ser limitadas, Caballero explicó que la que impulsa su grupo parlamentario tendría un carácter nacional y político mucho más amplio.
Los legisladores de Morena se han propuesto, como lo explica su vicecoordinador, modificar “la columna vertebral del sistema que es, la presidencia de la República; la parte corrupta que ayuda no sólo a que la corrupción se organice, sino a que el sistema político se mantenga a partir de ella”.
Neoliberalismo, sinónimo de corrupción
Virgilio Caballero subrayó que con el impulso del neoliberalismo como sistema económico, “la corrupción se hizo todavía más profunda porque, entre otras cosas, se privatizaron más de mil empresas de orden estatal y se entró en contacto con los empresarios para que, como parte del régimen político, garantizaran esa estabilidad”.
Analistas como Gary Becker y Douglas North –ambos galardonados con el Premio Nobel de Economía- alertaron sobre el “asalto” de grupos de intereses que supieron aprovechar el Estado en su propio beneficio para enriquecerse mediante mecanismos de privilegio, tráfico de influencias y corrupción, fundamentalmente en los procesos de privatización de las empresas públicas, en el otorgamiento de contratos y concesiones y en las compras gubernamentales.
Becker fue más duro en sus críticas al afirmar que en América Latina se consolidó un ”capitalismo de compadres”; sin embargo, Caballero advirtió que “Santa Anna sentiría envidia por lo que Peña ha hecho al entregar al país a partir de esa corrupción”.
A propósito del escándalo en la opinión pública –no así en las esferas de gobierno y aplicación de justicia- que se suscitó tras la revelación de la adquisición, por decirlo menos, suspicaz, de la Casa Blanca, el legislador y fundador del Canal del Congreso, criticó el “ridículo” que ha hecho Virgilio Andrade, titular de la Secretaría de la Función Pública, apapachando esa corrupción.
SNA, ni siquiera light
“En un sistema como el nuestro, que tiene en la corrupción su razón de ser, el aparato judicial es probablemente la parte más corrupta de todo. Los datos están a la vista: el 98% de los delitos ni siquiera se investiga; la corrupción va del Ministerio Público a la Suprema Corte de Justicia de la Nación”, apuntó el vicecoordinador, Virgilio Caballero.
Legisladores de Morena y del PT –incluido el coordinador de los senadores, Manuel Bartlett– consideraron que la reforma constitucional en materia de anticorrupción ni siquiera podría considerarse light, pues no ataca los instrumentos ni la médula de la problemática que ha saqueado los recursos públicos de la nación para transferirlos a manos privadas, por lo que consideran de vital importancia que la Comisión de la Verdad, se oriente a investigar la corrupción presidencial, así como el incremento patrimonial del Ejecutivo, los expresidentes y sus familias.
“Lo otro no tiene nada que ver con la lucha anticorrupción. Decir que es light es poca cosa; deja al presidente de la República fuera de toda investigación por conducta corrupta y permite que sea él quien nombre a los posibles fiscales del Sistema Anticorrupción, por lo tanto, el juzgado será juzgador y eso no tiene nada que ver con el combate a la corrupción. Lo que se está planteando, solo es una ratificación de la corrupción”, dijo el legislador y calificó como un aparato de propaganda la cacareada, pero inconclusa, reforma.