Enrique Legorreta / @enriquelego3_0
(08 de octubre, 2013).- La discusión sobre la reglamentación de las marchas y sus restricciones sigue dando de qué hablar, es por eso que en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) se llevó a cabo el foro “Derecho a la Manifestación: Alcances y Limitaciones”, organizada por el diputado local del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Eduardo Santillana.
Durante la plática, los expositores Ricardo Ortega y Armando Soto, abogados de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), coincidieron en que la ley actualmente castiga a quien comete actos como el de ataque a la paz pública durante una manifestación, y que la modificación que se quiere plantear en materia de las manifestaciones no es una opción viable.
“Me parece que cuando se plantea la idea de establecer una ley que reglamente las manifestaciones, esta ley, de entrada, se encuentra bajo sospecha. Bajo sospecha de estar atentando contra uno de los principios de los derechos humanos primordiales. Me parece que en una sociedad democrática el ejercicio de la libertad de expresión, el derecho a la manifestación y el derecho a la protesta social son derechos fundamentales para el desarrollo democrático de cualquier estado”, destacó Ricardo Ortega.
Por su parte, Armando Soto reiteró que esta discusión se trata de una pelea entre partidos, y que se olvida que las libertades no deben estar sujetas a censura:
“El tema del derecho a la manifestación últimamente ha causado una polémica en la Ciudad de México. Se ha convertido en un campo de batalla entre el panismo y el perredismo capitalinos. Para conciliar el derecho a la manifestación y el derecho al libre tránsito se debe hacer el ejercicio de existir en equilibrio entre la igualdad, la justicia y la libertad. Entonces, se debe de manejar ciertas normas para regular ambas acciones y que no se vea afectado el desarrollo económico de la ciudad”.
El diputado del PRD Eduardo Santillana señaló que la propuesta del Partido Acción Nacional (PAN) violenta la libertad que se tiene para expresarse, sobre todo, por el absurdo de pedir permiso a las autoridades para realizar estas acciones:
“Yo no ubico a qué autoridad se le pueda decir ‘oye, te voy a cerrar una calle’. Es decir, es un absurdo, es absurdo pedirle a la autoridad permiso para realizar una protesta, me parece incompatible. Lo que se plantea ¿es democrático o es autoritario?”.
Datos del sector empresarial señalan que en los últimos seis meses se han llevado a cabo 6.7 manifestaciones diarias en la Ciudad de México, lo que deja pérdidas millonarias.
El legislador perredista anticipó que en los próximos días se verá un debate cerrado, sin embargo, espera que se llegue a un consenso sobre el tema: “La ley tiene que ser general, impersonal y abstracta y me parece absurdo que por un hecho concreto se tenga que hacer una ley y generar instrumentos que pueden ser en el futuro muy graves para las libertades”.
