La Fiscalía General de la República (FGR) ha impugnado la libertad condicional otorgada a Julio César Chávez Jr., un giro inesperado en el caso que lo vincula con el crimen organizado. La FGR considera que la decisión del juez que lo dejó en libertad es ilegal, buscando que el boxeador regrese a prisión preventiva mientras se desarrolla la investigación.
El caso de Chávez Jr. ha tenido una trayectoria turbulenta. El boxeador fue detenido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE) y deportado a México el pasado 21 de agosto. Al día siguiente, un juez de control en Sonora lo vinculó a proceso por el delito de delincuencia organizada, específicamente en la modalidad de tráfico de armas.
Sin embargo, el juez determinó que Chávez Jr. podía enfrentar su proceso en libertad condicional. Esta decisión causó revuelo, ya que este tipo de delitos suelen requerir prisión preventiva. La defensa del boxeador argumentó que no existía riesgo de fuga ni peligro para la investigación, además de que las pruebas en su contra eran “especulaciones” y no evidencias sólidas.
La Fiscalía, a través de su delegación en Sonora, se ha opuesto firmemente a esta decisión. Al impugnar la libertad condicional, la FGR busca revertir el fallo y obligar al boxeador a continuar su proceso en la cárcel. Para la FGR, la libertad otorgada al deportista es “ilegal” y contraviene la seriedad de los cargos que enfrenta, que lo señalan por presuntos nexos con el Cártel de Sinaloa.
Con esta nueva acción legal, la situación de Julio César Chávez Jr. vuelve a ser incierta. El próximo capítulo se escribirá en los tribunales, donde la FGR buscará demostrar que el hijo de la leyenda del boxeo debe enfrentar la justicia tras las rejas.
