El jefe del Frente Al Nusra, el brazo sirio de Al Qaeda, llamó a multiplicar los ataques contra Rusia, cuya Embajada en Damasco fue blanco de dos proyectiles, casi quince días después del inicio de la intervención rusa en Siria para apoyar al régimen de Bashar Al-Assad.
Dos proyectiles impactaron contra la Embajada de Rusia en Damasco cuando se desarrollaba una manifestación de apoyo a Moscú. Las piezas de artillería, disparados por rebeldes islamistas desde los suburbios de la capital, no dejaron heridos.
“Este ataque es un atentado terrorista evidente para intimidar a los partidarios de la lucha contra el terrorismo e impedirles ganar una victoria contra los extremistas”, estimó el Ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov.
El jefe de Al Nusra, Abu Mohamad al Jolani, afirmó en una grabación sonora que la intervención rusa en Siria terminará con una derrota.
“La guerra en Siria hará que los rusos se olviden de los horrores vividos en Afganistán (…) Quedarán hechos añicos”, aseguró.
“Llamo a los muyahidines (combatientes islamistas) del Cáucaso a apoyar todo lo que puedan al pueblo de Siria. Si el ejército ruso mata a nuestra población, maten a la suya, si mata a nuestros soldados, maten a los suyos. Ojo por ojo”, añadió.
Para esto, asegura, los múltiples grupos rebeldes extendidos en toda Siria deben dejar de lado sus disputas.
“Hasta la desaparición y aplastamiento de la cruzada occidental y de la campaña rusa en territorio sirio”, clamó Abu Mohamad al Jolani.
Rusia ha concentrado sus bombardeos en el centro y el norte de Siria, donde se encuentra el Frente Al Nusra, sobre todo en las provincias de Idleb y Hama, en las que combatía contra otros grupos islamistas.