(10 de mayo, 2016. RevoluciónTRESPUNTOCERO).- Oscar Eduardo Ortega Rodríguez no era un delincuente, por el contrario, joven de 27 años, egresado de la licenciatura en Economía, no tenía antecedentes penales y se dedicaba a la compra y venta de automóviles.
A siete días antes de cumplir años, elementos de la Secretaría de Marina no solamente le arrebataron la vida, sino que mancharon su reputación y lo convirtieron en un falso positivo, a decir por familiares y amigos.
La madrugada del viernes 6 de mayo pasado, según información rendida por testigos y familiares ante el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL), y obtenida por Revolución TRESPUNTOCERO, Oscar Eduardo se encontraba conviviendo con sus amigos, cuando pasadas las dos de la mañana se retiró a su domicilio, quedando atrapado en medio de un operativo de las Fuerzas Federales.
Encontrándose cerca de las instalaciones donde estaban sus amigos, “ellos escucharon fuertes detonaciones de arma de fuego, seguidos de disparos aislados, para después enterarse que lo habían matado un grupo de marinos mientras manejaba su camioneta”, se explicó al licenciado Raymundo Ramos, Presidente del CDHNL.
La narración de los hechos da cuenta que durante más de dos horas, familiares y amigos de la víctima no tuvieron acceso al lugar, el cual se encontraba acordonado por autoridades federales y estatales, momento en el cual, se presume,le sembraron armas y municiones.
A esto se le suma la denuncia que existió manipulación de otras evidencias a fin de simular que existió una “agresión” o “enfrentamiento” en contra del personal de la Marina, por parte del joven. Agregando que fue el personal de la Secretaría de Marina Armada de México quien habría sembrado armas y municiones para encubrir el asesinato de Oscar Eduardo Ortega Rodríguez, ocurrido en Reynosa, Tamaulipas.
Derivado del homicidio, la familia del joven recurrió a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), para solicitar su intervención urgente, dependencia que ha enviado ya a personal especializado al municipio para revisar el lugar donde, se dio a conocer, que los marinos dispararon en contra de Oscar Eduardo.
Quienes también analizarán la trayectoria de los impactos que presenta su camioneta tipo pick up y la posición final del cuerpo, así como el informe de la necropsia. En tanto la Procuraduría General de la República (PGR), inició una averiguación penal, esto después que un familiar de la víctima presentara una querella formal “en contra de quienes resulten responsables por la muerte de Oscar Eduardo Ortega Rodríguez”, versa el documento del CDHNL.
Sobre el tema, el organismo no gubernamental, dio a conocer que “el personal de Fuerzas Federales que operan en Tamaulipas no respeta el Manual de Uso de Fuerza aplicable a elementos del Ejército, Marina y Fuerza Aérea.
Por lo que actúan para abatir y no para asegurar a un presunto agresor, además que regularmente disparan sus armas para causar muerte, sin advertencia o dejando sin protección la integridad de civiles inocentes”.
A su vez, se da a conocer que tampoco toman en cuenta los principios de oportunidad, proporcionalidad, racionalidad y legalidad, sin importarles las consecuencias de sus actos.
“Hace un mes mataron a un beisbolista también; un señor se encontraba jugando béisbol en un campo llanero y lo asesinó una bala perdida de un operativo de fuerzas federales, era el más reciente caso, antes de la muerte de Oscar Eduardo.
Del caso del joven nos enteramos apenas el fin de semana y procedimos hoy, la familia nos llamó para pedir asesoría, por lo que queremos pedirle a la Marina que no obstruya las investigaciones, que no altere las evidencias, que no permitan que sus elementos rindan falso testimonio, porque vamos a demostrarles que hubo un crimen por parte de la autoridad y exigiremos que pidan perdón a la familia y limpian el nombre de Oscar Eduardo”, aseguró a Revolución TRESPUNTOCERO, Raymundo Ramos.
Hasta el momento, informó, la Marina no ha hecho ningún pronunciamiento con respecto al caso, “por lo mismo estamos difundiendo esta información, ya que no ha trascendido de esta región”. A su vez, mencionó que Reynosa tiene dos años de violencia ininterrumpida, junto a Ciudad Victoria, en donde se encuentra fuerzas federales para, se dice, restablecer el orden. Sin embargo han cobrado la vida de sociedad civil inocente.
“Calculamos que van aproximadamente 14 víctimas en esta región, entre estudiantes, mujeres jóvenes, amas de casa, profesionistas Y trabajadores, en los últimos tres años. Todas estas muertes relacionadas con las Fuerzas Armadas, como producto de los operativos que hacen éstas.
Porque a los elementos no les importa armar una balacera en un centro comercial, en una escuela, en un hospital o en una oficina del gobierno, eso no tiene importancia para ellos. Nada más piensan en abatir, matar y ejecutar delincuentes”, puntualiza Ramos.
Quien agrega que, a los elementos de las fuerzas armadas, no les importa en lo más mínimo la población civil. Ya que con frecuencia cuando se les pide rendir cuentas, éstas niegan los hechos, también confunden a la opinión pública, en el caso de Oscar Eduardo publicando un comunicado oficial que lo convierte en un civil agresor, además de esto también se intimidan a las familias para que no prospere una demanda penal, “lo cual tenemos bastante bien identificado y estamos combatiendo”, dice Ramos.
Aún con el miedo que la familia del joven mantiene, no piensan quedarse callados, por lo que realizaron una manifestación durante el funeral del joven y este lunes frente a las oficinas de la PGR, en donde amigos, familiares y gente que conocía a Oscar denunció los hechos y aseguró que es inocente.
Ramos señala que el Comité demostrará que existió una responsabilidad por parte la autoridad Federal y un encubrimiento del gobierno del estado, “ya que esta autoridad emitió un comunicado donde nombra a Oscar Eduardo como civil agresor, violando la presunción de inocencia, es como tenemos a dos autoridades confabuladas para ocultar un hecho lamentable: la muerte violenta del civil ajeno a la delincuencia”, indica el defensor de Derechos Humanos.
También comenta que la Marina debería concentrar a los elementos y ponerlos a disposición de una autoridad hasta que se esclarezcan los hechos, no protegerlos y tampoco negar que le sembraron evidencias a una persona fallecida, en el caso de Oscar Eduardo, y tampoco distorsionar la verdad.
“Si hay encubrimiento van a continuar este tipo de abusos de autoridad y estos crímenes impunes, si no lo hay, quien comete un error, aunque sea en función de su trabajo deberá afrontar las consecuencias”, puntualiza Ramos.
