En medio de señalamientos que involucran a exfuncionarios de Tabasco, la presidenta Claudia Sheinbaum dejó en claro que no hay intocables en su gobierno. Lo dijo sin rodeos:
“Sea militante de Morena o no, nosotros no vamos a cubrir a nadie que tenga vínculos con algún grupo delictivo o por un acto de corrupción.”
El mensaje se da tras la polémica en torno a Hernán Bermúdez, quien fuera titular de Seguridad en Tabasco, hoy buscado por supuestos vínculos con el grupo criminal “La Barredora”, mientras el estado era encabezado por Adán Augusto López.
Frente a la pregunta acerca del caso y la visita que habría tenido de Adán Augusto López, la mandataria federal adoptó una postura de firmeza, pero sin caer en juicios anticipados. Reafirmó su compromiso con la legalidad, subrayando que ya se abrió una carpeta de investigación contra Bermúdez, y que si hay elementos suficientes, el proceso deberá seguir su curso.
“Aquí, de inmediato, cuando hubo conocimiento de vínculos, se abre la carpeta de investigación y la orden de aprehensión. Eso es lo primero.
Ni protección… ni linchamientos
Sheinbaum también pidió no ceder ante el espectáculo mediático. Aunque fue tajante al asegurar que no se encubrirá a nadie, también advirtió que el respeto al debido proceso y la presunción de inocencia son principios fundamentales de su administración.
“Así como no debe cubrirse absolutamente a nadie, si es que hay indicios de algún vínculo con la delincuencia o de algún acto de corrupción o alguna ilegalidad, de la misma manera no estamos de acuerdo en el linchamiento mediático”, puntualizó.
Desde el primer día de su mandato, la presidenta ha reiterado que su administración se regirá por los principios de justicia, transparencia y cero impunidad, sin importar la filiación política de las personas involucradas.
“Si la Fiscalía tiene contra alguien, que sea militante de Morena o no, alguna evidencia, adelante, que continúe la investigación. Nosotros ni la Fiscalía, aunque es autónoma, vamos a cubrir a nadie”, añadió.
“Que la justicia actúe”
En el caso específico de Adán Augusto López, Sheinbaum destacó que él mismo expresó públicamente que, si las autoridades lo llaman, acudirá a declarar. Para la presidenta, eso es lo correcto: no obstaculizar el actuar de la justicia y tampoco ceder a la presión de los titulares o los trending topics.
“Él mismo ya lo dijo, si lo llama la autoridad, va a ir a declarar. Entonces, si hay algo contra él o contra cualquier otra persona, que siga la investigación”, afirmó.
Gobierno con sello propio
Claudia Sheinbaum ha comenzado su sexenio marcando distancia de cualquier sospecha de protección o impunidad. Si bien reconoce los logros del gobierno anterior, también ha subrayado que su presidencia tendrá identidad propia, y parte de esa identidad será la aplicación de la ley sin excepciones ni favoritismos.
La declaración de hoy envía un mensaje a aliados y adversarios por igual: la nueva administración no será un escudo para quienes enfrenten investigaciones.
Con un tono institucional pero claro, Sheinbaum reafirma su línea:
Ni protección por cercanía política, ni condenas sin pruebas. La justicia, dice, debe hablar por sí sola.
