Ciudad de México. Un nuevo conflicto diplomático ha surgido entre México y Estados Unidos a raíz de la lucha contra el narcotráfico. Tras la difusión de un comunicado por parte de la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) anunciando el “Proyecto Portero”, un supuesto operativo conjunto en la frontera, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha negado tajantemente su existencia. Por su parte, el jefe de la DEA, Terry Cole, insiste en que la voluntad de colaboración del gobierno mexicano es inédita.
Una historia de tensiones y soberanía
El debate sobre la colaboración con agencias extranjeras no es nuevo en México. Durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador, se pusieron límites claros a la operación de la DEA en territorio mexicano. Un punto de quiebre fue la detención en Estados Unidos del exsecretario de Defensa, Salvador Cienfuegos, en 2020. Su posterior liberación y exoneración en México, tras demostrarse que la DEA lo había detenido sin pruebas, llevó al gobierno de López Obrador a restringir las actividades de la agencia en el país.
Estos límites, según Sheinbaum, continúan en su administración. La presidenta ha sido enfática en defender la soberanía de México, reiterando que las operaciones de seguridad son responsabilidad de las instituciones nacionales. “México es un país libre, independiente y soberano. Colaboramos, nos coordinamos, pero no nos subordinamos”, ha repetido en su conferencia matutina, aclarando que un agente extranjero que no cumpla con la ley mexicana podría ser sancionado.
La DEA y Sheinbaum: Versiones opuestas
La polémica se intensificó cuando la DEA emitió un comunicado sobre el “Proyecto Portero”, una iniciativa para combatir a los “guardianes” de los cárteles en la frontera. Sheinbaum desmintió rápidamente la información.
“No hay ningún acuerdo con la DEA. Emiten el comunicado, no sabemos con base en qué”
Días después, el jefe de la DEA, Terry Cole, aprovechó una entrevista en el canal Fox de Estados Unidos para contradecir a la presidenta. Cole aseguró que, gracias a los esfuerzos de la administración de Donald Trump, la colaboración de México ha alcanzado “niveles récord”. Esta declaración se dio en el contexto del Día Internacional contra el Fentanilo, un tema de gran preocupación para el gobierno estadounidense.
La presidenta Sheinbaum ha cuestionado la intención detrás del comunicado de la DEA, sugiriendo que podría ser un intento por mostrar un cambio en la relación bilateral. Aunque admitió que se está trabajando en un acuerdo de seguridad con el Departamento de Estado de EE. UU., coordinado por la Secretaría de Relaciones Exteriores, insistió en que el “Proyecto Portero” es ajeno a la realidad. “Nunca va a haber subordinación”, remató. Este cruce de mensajes pone en evidencia las distintas visiones y prioridades de ambos gobiernos en la lucha contra el crimen organizado.