Redacción / @Revolucion3_0
(06 de octubre, 2013).- Moscas que se reproducen, tienen hasta 750 huevos y sus larvas multiplican su peso 400 veces en tan sólo tres días. Los kilos del insecto se traducen en peso de comida para alimentar granjas de peces en Sur África: la solución para disminuir su precio en el mercado y hacerlo más asequible para el consumo humano.
La idea proviene de la empresa Agriprotein, que contempla la producción de proteína más barata –que la soya, por ejemplo- y de mejor calidad. A esto se le suma que su materia prima son desperdicios orgánicos y la mosca común. En poco espacio, resumen sus creadores, la instalación se deshace de la basura local, crea proteína y alimenta la cadena de consumo.
Los empresarios alegan que las larvas son un alimento cotidiano en la vida silvestre de peces, puercos y pollos e insertarla en su crianza de engorde ayuda a reducir el precio de su carne por kilo.
Agriprotein contempla la posibilidad de que en un futuro las larvas se puedan comercializar, incluso, para consumo humano. Por lo pronto su empresa abrirá una nueva planta en el país africano para comienzos de 2014, mientras que 30 países más han solicitado su implementación.